La terapia de canalización es una práctica espiritual complementaria que permite conectar con los guías espirituales de una persona para recibir mensajes, orientación y claridad. A través de un canal —es decir, una persona que actúa como intermediario o facilitador— se abre un espacio energético y consciente donde puede fluir la información proveniente de planos superiores, seres de luz o guías del alma.

 

Durante una sesión, el terapeuta canaliza mensajes que suelen ofrecer apoyo emocional, claridad sobre procesos personales, o incluso respuestas a preguntas profundas del alma. Esta terapia no reemplaza tratamientos médicos o psicológicos, sino que los complementa, brindando una mirada más amplia desde el nivel espiritual.

 

La canalización es especialmente útil cuando la persona se siente perdida, necesita orientación en decisiones importantes, o simplemente busca reconectar con su propósito y sabiduría interior.

 

Cada experiencia es única, porque cada alma tiene sus propios guías y caminos. Lo importante es que el mensaje siempre llega con amor, respeto y con la intención de contribuir al bienestar y evolución de quien lo recibe.

Ir al contenido